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domingo, 16 de agosto de 2015

MONASTERIO DE RUEDA Y MUSEO DE LA BATALLA DEL EBRO EN FAYÓN

Ruta del Viaje





Desde Zaragoza coger la carretera nacional 232. Una vez pasado Quinto aparece un desvío que indica dirección hacia el monasterio de Rueda, cogerlo y seguir esa carretera (A-221) hasta casi el final. Pasado Sástago y cruzado el puente, a la derecha hay un apartadero desde donde contemplar el curso del río Ebro y la citada localidad. Después cuando se ha terminado de subir a la izquierda sale un camino que lleva a una antigua torre militar usada en las guerras carlistas. A la vista de Escatrón a la izquierda aparece una señal indicando el monasterio, es una carretera estrecha pero en buen estado. Enseguida se llega al aparcamiento del monasterio.

MONASTERIO DE RUEDA 

Pertenece a la orden del císter, aunque está pegado a Escatrón, se encuentra dentro del término de Sástago. Su origen se data en 1152 con la fundación de la abadía de Nuestra Señora de Saltz. En 1162, a partir de la cesión de tierras Villanueva de Gállego, se fundó la abadía de Juncería, precedente inmediato de Rueda.

En 1182 el rey Alfonso II de Aragón cede a los monjes el castillo y villa de Escatrón, Zaragoza. Se trata de un emplazamiento a orillas del Ebro, más acorde con el espíritu cisterciense, dotado de territorio por colonizar, donde llegarán a partir de 1202 para fundar el actual monasterio. Poco después comenzarán las obras que se prolongarán durante varios siglos, sufriendo los altibajos económicos del Reino de Aragón y de la comunidad monástica en particular, la actividad constructiva va a desarrollarse durante todo el siglo XIII en sus ámbitos fundamentales. En 1238 se consagraba la iglesia, y en 1292 todavía se confirmarán privilegios relacionados con la extracción de piedra y madera para la obra. Pero hasta la segunda mitad del siglo XIV y principios del XV no puede considerarse cerrado el conjunto de la fábrica medieval con las últimas fases de la iglesia.


Desde los primeros momentos de la construcción del monasterio, también se inician las obras de infraestructura hidráulica. Consisten en el azud y la noria o rueda que elevaba el agua del río hasta el acueducto de factura gótica, en parte visible y en parte subterráneo, que reparte el agua por el conjunto monástico siguiendo las disposiciones propias de la Orden.

Con la desamortización de Mendizábal, a resultas de los decretos de 1836 y 1837, los bienes del monasterio serán utilizados para labores agrícolas, el patrimonio artístico se dispersará y buena parte del mismo resultará destruido.


Ya recientemente, las edificaciones postmedievales y la huerta son cedidas por su último propietario a la Diputación General de Aragón, en el año 1990. La titularidad de la zona medieval del monasterio, que desde la desamortización había pertenecido al Estado, en 1998 fue traspasada a la Diputación General de Aragón con el compromiso de impulsar su restauración.



Las entradas se sacan en la hospedería, donde una señorita muy simpática y amable te explica el recorrido brevemente y te da un pequeño plano donde te informa del recorrido a realizar y de las zonas más interesantes.



Nada más salir vemos de frente el monasterio, a la derecha la hospedería con unos restos del antiguo monasterio y a la izquierda otros edificios. En mi opinión el pequeño jardín debería estar un poco más cuidado, pero para gustos, colores.




Lo primero es entrar por la iglesia, donde se ve una nave grande, desangelada y con las capillas laterales  en proceso de recuperación. El retablo se encuentra en la iglesia de Escatrón, ya que por la desamortización de Mendizábal  se acordó que allí se instalara, y las huertas del monasterio pasaran a ser dominio de Sástago.

Capilla de la iglesia

 Interior de la iglesia

Dibujos de la sacristía

A continuación toca pasar por la sacristía fijándonos en los dibujos de los contrafuertes. Seguimos andando y llegamos donde antiguamente se ubicaban las habitaciones de los monjes. Bajando las escaleras llegamos al claustro donde lo primero es la sala capitular (se llama así porque cada día se leía un capítulo de la biblia), junto a ella se encuentra el scriptorium; lugar donde los monjes traducían y copiaban libros.

Dormitorios

 Canal para el agua

Scriptorium

Toca visitar ahora el lavatorio, frente a ella está el refectorio o comedor y anexo a él se encuentra la cocina.


Lavatorio
Refectorio

Rodeando el claustro podemos observar la bonita torre del monasterio, algunas tumbas y la belleza de las figuras y capiteles.






Se acaba la visita al monasterio pero no a su entorno, ya que si salimos dirección al aparcamiento y giramos a la izquierda, siguiendo las señales se llega al río, donde se encuentra el antiguo acueducto que abastecía de agua el monasterio, la noria que con ayuda de un pequeño motor aún funciona.
También se ha recuperado una pequeña mejana; esto es una pequeña isla, a modo de parquecillo,  en medio del río donde se puede disfrutar del sonido del río y de las vistas.



Acueducto que llevaba el agua al monasterio


La noria

La mejana

Desde la mejana

MUSEO DE LA BATALLA DEL EBRO DE FAYÓN 

Una vez visitado el monasterio de Rueda, salir a la A-221 en dirección a Caspe, de ahí por la N-211 hacia Mequinenza, para antes de llegar girar a la derecha por la A-1411 primero y luego coger la CV-103. 

El museo se encuentra a las afueras del pueblo, en un polígono industrial, está situado en la calle Bajada la fábrica S/n calle B; no tiene pérdida, se ve enseguida.

Maquetas de aviones

Nada más entrar hay una vitrina con maquetas de aviones que participaron en la batalla, una ametralladora y un montón de libros. Tras sacar las entradas hay un voluntario que te va contando un poco todo lo que sucedió. Yo tuve la suerte de conocer a un “becario” de más de 90 años que había luchado en todos los frentes y que me contaba pequeñas anécdotas.  Lo primero que se ve a la derecha es una representación de cómo las tropas republicanas hicieron el paso del Ebro con barcas y puentes, en la pared de la izquierda hay muchas fotos que van desde los militares más destacados de uno y otro bando, fotografías de la batalla, fotos del armamento y bombas inertes. Lo siguiente es una pequeña mesa donde hay una pequeña bomba (desactivada) y un casco que se pueden tocar. A continuación ya viene la exposición en sí.

Representación del paso del Ebro

 Vitrina con diversa munición

Soldado italiano

Lo primero un antitanque ruso capturado en Belchite, se le perdió la pista y que ha llegado al museo desde  EEUU. A su lado derecho un maniquí con uniforme republicano de un comunero de París, y, al otro lado un par de maniquíes representando a los moros que lucharon con Franco, uno vendiendo productos y, el otro vestido de soldado. Éste primer trozo está lleno de vitrinas y mesas acristaladas con una multitud de cosas:

Condecoraciones de ambos bandos
Espoletas de mortero
Granadas de mortero
Sables
Documentación


La siguiente sala se muestra cómo se vivía, se combatía, se organizaban las tropas, etc… Lo primero que aparece es la zona de transmisiones con los enlaces, todo perfectamente cuidado y explicado, lo siguiente como era un puesto de mando, ojo porque se pasa por un pequeño pasillo que tiene el techo muy bajo. 

Puesto de transmisiones

Puesto mando nacional

A continuación está el puesto de protección y el búnker de ametralladoras con un gran realismo. Ahora toca reponer fuerzas en el frente, qué mejor lugar que la cocina a la que no le falta de nada. Junto a ella se encuentra el almacén de munición. Más adelante se encuentra el hospital de campaña donde llegaban los soldados heridos del frente, se les atendía y se les mandaba a un hospital u otro dependiendo de la gravedad de las heridas.

Ametralladora

Hospital de campaña


Lo siguiente, a mí me impresionó y es la cantidad de material que se recogió de las trincheras. Ahora viene una pequeña parte dedicada a la aviación que participó en la batalla. Llegamos a la zona donde se encuentra el armamento más pesado que se usó. En una esquina hay mapas, y el resto es material bélico; cañones, antiaéreos, morteros, obuses, bombas, granadas, así como una gran vitrina de cristal ocupando toda una pared llena de infinidad de armas “pequeñas”  fabricadas en una gran diversidad e países y que se utilizaron en la Guerra Civil Española. 

 
Chatarra

Obús Schneider

Artillería antiaérea modelo 18-36 del calibre 88-56

Obús

 Soldado legionario

Armas de diversos países

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